ramoneando

cumple, desorden, creatividad

Era una torta que parecía un flan, por consistencia y sabor. La empecé cortando de manera normal, como si fuera con la forma de pedazos de pizza. Pero después la empecé a cortar de forma muy irregular. Porque era para cortar pedazos chicos que la gente pueda tomar con la mano y comer de un bocado. Armé un patrón sin niguna regularidad, como varios sombreados de distintos ángulos como haría el dibujante Bob Crumb capaz: esto para explicar breve y por buscar un parecido forzado que se explique.

Muchos cortarían cualquier pastel como en cuadrados, como con la pasta frola. Pero yo simplemente pensé en una manera de hacer trozos finos para que nadie se empalague. Idiosincracia tal vez. Para el público era gracioso, loco, o al menos digno de comentario. Pero cortamos varias cosas sin patrón: milanesas por ejemplo. ¿Te imaginás cortar milanesa en orden?

En aikido variar no es solo una virtud sino una exigencia.