ramoneando

La conducta del Estado es la violencia, y mientras el ejercicio de esta parte del Estado la llama él mismo "derecho", al ejercicio de la violencia por el individuo le llama "delito". Si no hago lo que él quiere, el Estado dirige contra mí con todas sus fuerzas, sus garras de león y sus uñas de águila. Pues es el rey de los animales, es león y es águila.

Los postergados se han atrevido a preguntarse: ¿Qué es lo que os da la seguridad de vuestra propiedad y lo que os hace priviligiados? Y se han respondido: la causa de ello es que nosotros nos abstenemos de atacaros. Es, pues, la causa de ello nuestra protección. Y ¿qué nos dais vosotros a cambio de esto? Dais coces y vilipendio al "pueblo ordinario"; le dais una opresión policíaca y un catecismo cuyo precepto fundamental es este: ¡respeta lo que no es tuyo, lo que pertenece a otros; respeta a los demás y especialmente a los superiores! Pero nosotros oponemos a esto lo siguiente: si queréis nuestro respeto, comprádnoslo por el precio que nos plazca a nosotros. Nosotros os dejaremos vuestra propiedad si nos compensáis convenientemente esta dejación.

– Max Stirner